Dos ciudades
Desde los primeros planos, voces y ruidos van construyendo la sinfonía de una ciudad. El panorama de La Paz desde las alturas se va definiendo. Los amigos llegados a la capital se internan en el laberinto. Alguien trata de ayudarlos.
De pronto la cámara se aleja de la ciudad. La atmósfera urbana desaparece. En otro lugar, un hombre mira los árboles, escucha los sonidos de la naturaleza.
En el mercado, los amigos soportan la dura faena de carga. Las vendedoras los miran cargar bultos y comentan. Durante un momento de descanso, Elder empieza a sentirse enfermo. Como en "Viejo calavera", cuando caminaba por los túneles oscuros de una mina bajo tierra, el personaje de Elder (José Luis Ticona) vuelve a sentirse inestable, como si algo lo asfixiara y no lo dejara respirar.
"El gran movimiento" (2021) es el documento de una época –explica el director Kiro Russo– dentro de un ecosistema de espacios y ambientes que, aunque desconectados, se muestran coherentes en la historia.
A otra ciudad del Altiplano, al sur del Perú, llega Elisbán (Jesús Luque) en un bus para buscar integrarse al movimiento laboral. Aunque la indiferencia, el ninguneo y el no tener donde dormir le hagan sentirse casi invisible, Elisbán hace amistad con una vendedora en el mercado que le ofrece comida; luego el dueño de un bar lo contrata de mesero y después un proactivo empresario, al que no le gustan los ociosos, lo pone a cavar una zanja junto a su casa.
Los empleos esporádicos parecen mejorar las perspectivas de sobrevivencia. Pero no hay mucha estabilidad en las calles de Puno, a veces llenas de danzas y música, muy cerca del gran lago en la frontera peruano-boliviana donde naciera el primer inca que da título al film "Manco Cápac" (2020) de Henry Vallejo.
A pesar de todo o quizás por ello se desprende de estas vidas inciertas e informales, cierto humor; una actitud despreocupada frente a la realidad y el porvenir. No hay una idealización o transformación sino más bien una transparencia en las trayectorias y experiencias de estos personajes que deambulan por las calles del altiplano andino.
Comentarios